El impacto de la basura electrónica y la acción venezolana

El ser humano se encuentra sumergido en la era tecnológica, rodeado de dispositivos que lo conectan con el mundo, desde el teléfono móvil que lleva en el bolsillo hasta el televisor que preside en la sala de su casa o habitación. Esta importante herramienta se ha convertido en una extensión que forma parte del ser. Pero… ¿Qué ocurre con estos aparatos al desecharse? ¿A dónde van a parar realmente? La respuesta, lejos de ser simple, esconde una realidad inquietante que afecta a todas y todos.

Imagina por un momento la cantidad de dispositivos electrónicos que se desechan cada día en el mundo. Millones de teléfonos móviles, computadoras, televisores, impresoras, refrigeradores, lámparas led, entre otros; se han convertido en una montaña creciente de «basura electrónica», lo que ha generado un problema multifactorial que impacta significativamente al ambiente y la salud a nivel mundial.

Las palabras Electronic Waste o “residuos tecnológicos”, también conocido como E-Waste, es un término utilizado para referirse a los desechos o basura generados por productos electrónicos en desuso, que hayan culminado su vida útil; esto incluye una amplia variedad de dispositivos y equipos sumamente contaminantes debido a los elementos que los componen como el cobalto, galio, mercurio, cromo, cadmio, litio, entre otros.

Un estudio realizado por la Universidad de McMaster en Canadá, reveló que solo en el caso de los teléfonos móviles se utilizan el 80% de los elementos de la tabla periódica y más de la mitad de la población posee uno.

El peligro de los componentes electrónicos

La extracción de una gran cantidad de elementos químicos para la fabricación de equipos electrónicos y eléctricos tiene un impacto ambiental considerable, incluyendo la degradación de ecosistemas, contaminación del suelo, agua y emisión de gases de efecto invernadero. Hay que destacar que, la industria tecnológica se encuentra en el top diez de los máximos contaminantes a nivel mundial, debido a la responsabilidad que tiene por producir el 5.5% de las emisiones de carbono en el mundo.

Es interesante saber que sustancias como el arsénico, plomo, mercurio, cobre, entre otros; que se encuentran en el suelo, agua, cenizas, sedimentos y el aire de los grandes vertederos de chatarra, producen efectos adversos en el planeta y la salud humana. Un ejemplo de ello es la batería de níquel-cadmio, que se encuentra mayormente en los equipos electrónicos portátiles; esta puede llegar a contaminar 16.000 litros de agua y un televisor puede polucionar alrededor de 80.000 litros.

En este sentido, la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi), señala que existen dispositivos que son altamente tóxicos, incluso podrían llegar a ser cancerígenos. Estos son conocidos como Contaminantes Orgánicos Persistentes (COPs) que pueden dispersarse a través de grandes distancias mediante el viento o las corrientes oceánicas, resistiendo a la degradación ambiental y acumulándose en el tejido de los organismos vivos.

Hay que tener en cuenta que, la gran cantidad de elementos que albergan en el interior de los dispositivos electrónicos pueden causar diversos daños en la salud, especialmente el mercurio que produce daños al cerebro y el sistema nervioso, el plomo que potencia el deterioro intelectual debido al efecto perjudicial que tiene en el cerebro y el sistema circulatorio; y el cromo, el cual está altamente relacionado con afecciones en los huesos y los riñones.

Es realmente preocupante ahondar en el tema, ya que según el Monitor Mundial de Desechos Electrónicos 2020 (Global E-Waste Monitor) de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), en el año 2019 se generaron 53.6 millones de toneladas de desechos electrónicos en el mundo, y la cifra aumenta aproximadamente a 2.5 millones de toneladas al año, de las cuales solo un 17.4% se recicla correctamente. De continuar estas cifras, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que se podrían alcanzar los 120 millones de toneladas de chatarra para el 2050.

Para muchas personas es completamente ajeno pensar que los residuos electrónicos son un problema que se encuentra en constante crecimiento. Según un artículo publicado en el portal web “Expansión” en el año 2021, la cantidad de desechos aumentó tres veces más rápido que la población mundial y existen 347 millones de toneladas métricas de estos aparatos en todo el planeta.

Camino hacia una Latinoamérica con futuro sostenible

Alfredo Cueva, Oficial de Desarrollo Industrial de la Onudi, mencionó en el año 2015 que el tema de la “basura electrónica” ha cobrado suma importancia en los últimos tiempos, sobre todo en América Latina.

«Debido al crecimiento económico acelerado y nivel de desarrollo de la región, la cantidad de basura electrónica está creciendo incluso más rápido que en otras regiones», expresó.

Como una medida de prevención ante el vertiginoso aumento de los residuos electrónicos en el continente donde el 97% de ellos se gestionan de manera inadecuada, la Onudi propuso el proyecto ONUDI-FMAM para el “fortalecimiento de las iniciativas nacionales y mejora de la cooperación regional para el manejo ambientalmente racional de los COP en los desechos de equipos eléctricos o electrónicos (RAEE)”, implementado desde el año 2018 y culminado recientemente el pasado año 2024.

El mismo, asiste a 13 países de la región en cuanto a asesorías para la actualización de regulaciones en el área, también busca armonizar aspectos clave de las políticas de residuos electrónicos, fortalecer la cooperación regional e intercambiar conocimientos que permitan el reciclaje óptimo para el aprovechamiento de materiales reutilizados, además de capacitar y sensibilizar al personal técnico. De esta manera se protege el ambiente de los residuos peligrosos, recupera materias primas y proporciona productos restaurados alargando su vida útil.

Según el informe elaborado por el Programa de Ciclos Sostenibles (Scycle), copatrocinado por la Universidad de las Naciones Unidas (UNU por su sigla en inglés) y el Instituto de las Naciones Unidas para la Formación Profesional e Investigaciones (Unitar), participan países como Argentina, Bolivia, Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay y Venezuela.

Dentro del marco del también llamado “Proyecto Residuos Electrónicos América Latina (PREAL)”, se han desarrollado diversas estrategias para fortalecer las capacidades de cada nación en cuanto a su propia necesidad en temas relacionados con el manejo ambientalmente racional de los RAEE, incluyendo la recolección, tratamiento, reciclaje y la gestión de contaminantes peligrosos.

Un componente clave de este proyecto ha sido la capacitación y formación de casi 15 mil personas en Chile, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá y Venezuela, así como también se han enviado 230 toneladas métricas de equipos como computadoras, celulares y electrodomésticos para su gestión ambientalmente racional. Es importante considerar que a pesar de los altos índices de desechos que se generan en América Latina y el Caribe, existen países con instalaciones para el tratamiento de residuos electrónicos especializados para algunas categorías y/o determinados productos.

Venezuela cuenta con instalaciones que realizan actividades relacionadas con el tratamiento de RAEE donde se puede destacar la conformación de los comités (nacional y científico) de RAEE y el fortalecimiento de las mesas técnicas de aseo, esto como resultado del trabajo conjunto entre el Estado venezolano, organizaciones no gubernamentales, sector privado e instituciones educativas que buscan establecer un marco para la gestión adecuada de estos residuos.

Cayapa Heroica: Reutilización y resiliencia tecnológica en Venezuela

Una de ellas es el plan nacional Cayapa Heroica, como iniciativa de la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), impulsada por el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt). Si bien su objetivo principal se centra en la recuperación y reparación de equipos médicos, tecnológicos y de telecomunicaciones, esenciales para el funcionamiento de instituciones públicas, educativas y hospitalarias, su labor contribuye significativamente a la reutilización de equipos electrónicos y eléctricos.

Al reparar y poner nuevamente en funcionamiento más de 6 mil dispositivos hasta la fecha, que de otra forma podrían convertirse en residuos, la Cayapa Heroica no solo optimiza recursos y fortalece la independencia tecnológica del país, sino que también promueve una cultura de reutilización y extiende la vida útil de los equipos, mitigando así la generación de RAEE y fomentando prácticas más sostenibles.

En este sentido, Jarson Manjarrés, jefe de la Unidad de Sistemas Inalámbricos de la Fundación Cendit mencionó que, en el proceso de reparación de estos equipos electrónicos y eléctricos, se pueden reutilizar componentes de algunos que estén dañados para reparar otros.

“En el caso de la Fundación, ofrecemos apoyo a otras instituciones hermanas en la revisión, mantenimiento correctivo y preventivo, y reparación de distintos equipos; un ejemplo de ellos son las fuentes conmutadas que se usan para alimentar de energía el servidor de las radio bases, para que estas puedan transmitir en óptimas condiciones las señales móviles o de Internet. Desde el 2021 hasta la fecha tenemos un aproximado de 400 equipos de este tipo que se han recuperado satisfactoriamente”, señaló.

De la misma manera, el país cuenta con un conjunto de instrumentos legales y normativas que tienen como finalidad regular los desechos peligrosos, una de ellas es la recién publicada Resolución N.º 022, establecida el pasado 30 de abril del 2024. Esta normativa representa un avance significativo para Venezuela, específicamente en el tema de la gestión de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE).

Este tipo de reglamento se dispone a fin de reducir la generación de RAEE, promoviendo prácticas de consumo responsable y la extensión de la vida útil de los aparatos electrónicos. Acompañada del ordenamiento jurídico de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Ley Orgánica del Ambiente, Ley Penal del Ambiente y la Ley de Gestión Integral de la Basura. En este sentido, el Estado venezolano busca asegurar el aprovechamiento, valoración y disposición final adecuada de estos residuos, fomentando la recuperación de materiales valorizables y minimizando los impactos ambientales negativos.

La gestión responsable de los residuos electrónicos es una tarea urgente y necesaria. El futuro del planeta y la salud de las personas dependen de ello. Es un desafío global que exige la atención y la acción coordinada de todos. Concienciar sobre el impacto ambiental y en la salud de estos desechos, promover prácticas de consumo responsable, apoyar iniciativas de reutilización y reciclaje, e impulsar el desarrollo de marcos legales sólidos son pasos fundamentales para construir un futuro más sostenible y proteger nuestro planeta para las generaciones futuras.

Prensa Cendit/ Isabel Hernández

Personal del Cendit discute sobre la ciencia cuántica y su rol en el avance de las telecomunicaciones

La ciencia cuántica es la rama de la física que estudia el mundo de lo extremadamente pequeño como los átomos, electrones, y la manera de interactuar entre sí. Esta tecnología representa una oportunidad importante para el avance del mundo, ya que es una herramienta que permite dar respuesta a las necesidades sociales, económicas, ambientales, científicas y tecnológicas de los países que la aplican.

A nivel mundial solo 30 países poseen acceso a la computación cuántica, en el caso de la región de América Latina y el Caribe se encuentra en un momento crucial para la incorporación y el desarrollo de esta tecnología, en la que cada vez son más las naciones que apuestan a su aplicación para lograr un mayor rendimiento en sus proyectos.

La Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), organizó un espacio con todos los trabajadores y trabajadoras para compartir conocimientos básicos en el tema, liderado por el director ejecutivo, Dino Di Rosa, Magíster en Investigación de Telecomunicaciones a Alta Frecuencia.

La actividad generó un intercambio de ideas que visualizó algunas de las iniciativas y aplicaciones que apuntan hacia dónde va esta tecnología en áreas importantes como la Criptografía Cuántica, que permite la creación de sistemas de comunicación seguros imposibles de interceptar con la tecnología actual; Comunicaciones Cuánticas, que facilita la transmisión de información utilizando qubits (unidad básica de información en la computación cuántica); y la Computación Cuántica para Optimización de Redes, donde las computadoras cuánticas podrían mejorar el diseño y la gestión de redes de telecomunicaciones, aumentando la eficiencia del sistema comunicacional.

Di Rosa resaltó que la institución cuenta con profesionales altamente capacitados para desarrollar investigaciones, productos y servicios innovadores, a través de los conocimientos que poseen para ofrecer soluciones tecnológicas que respondan a las necesidades del país. Asimismo, existen instituciones académicas y centros de investigación en Venezuela con capacidades en física, matemáticas e ingeniería para el desarrollo de la ciencia cuántica en telecomunicaciones.

El encuentro sirvió como un espacio para conectar con los investigadores venezolanos, para discutir las oportunidades de desarrollo de proyectos de investigación conjunta, además, de presentar un panorama general de las tendencias actuales en investigación cuántica a nivel mundial y su impacto en diversos sectores.

Hay que recordar que, el pasado mes de mayo del 2024 la nación de Ghana presentó ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una resolución formal para proclamar el 2025 como Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuánticas (IYQ, por sus siglas en inglés); con motivo de rendirle tributo al centenario que se cumple desde los primeros trabajos de la mecánica cuántica.

Dicha resolución fue copatrocinada por más de 70 países, con un amplio apoyo de la comunidad científica internacional y gobiernos nacionales; esto con la finalidad de despertar en el público la conciencia sobre la importancia e impacto de la ciencia cuántica y sus aplicaciones en todos los aspectos de la vida como la energía, educación, salud humana, comunicaciones, entre otros.

En su cuenta de Telegram, la vicepresidenta Sectorial de Ciencia, Tecnología y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, planteó que la computación cuántica avanza a pasos agigantados para crear una verdadera revolución tecnológica y afirmó que el desarrollo de la computación cuántica podría ser beneficioso para el país.

“La seguridad informática, la biomedicina, el desarrollo de nuevos materiales y la economía, son algunos de los ámbitos que pueden verse beneficiados por el uso de esta tecnología, pero es necesario tener mayor acceso para que nuestros países puedan gozar de estos beneficios”.

Si bien el desarrollo de la ciencia cuántica en las telecomunicaciones en Venezuela se encuentra en una etapa inicial, existen oportunidades importantes para avanzar en este campo. La capacidad académica y el contexto del Año Internacional de la Ciencia y la Tecnología Cuántica son factores bases para impulsar el desarrollo de esta tecnología en el país, lo que inspira a la formación de talento humano y la colaboración internacional para aprovechar al máximo el potencial de la cuántica en las telecomunicaciones de la región.

Prensa Cendit/ Isabel Hernández

Cendit conversa sobre el manejo seguro de fuentes radiactivas selladas en desuso

La protección radiológica de fuentes radiactivas selladas en desuso (FRSD) es un aspecto crucial para garantizar la salud pública y la seguridad ambiental. Estas fuentes, aunque ya no se utilizan para su propósito original, continúan emitiendo radiación y pueden representar un riesgo significativo si no se manejan de manera adecuada.

La gestión segura de las FRSD es un desafío global que requiere una colaboración estrecha entre los países del mundo, a través del intercambio de información, transferencia de tecnología y cooperación en materia de regulación, para así establecer estándares internacionales y fortalecer las capacidades nacionales.

La Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), realizó el cuarto encuentro semanal para compartir conocimientos y experiencias, esta vez sobre “Formulación de Políticas y Estrategias Nacionales para la Gestión de las Fuentes Radiactivas Selladas en Desuso”, liderada por Luis Santos, director de Desarrollo e Investigación (DI), quien participó en el Curso de Protección Radiológica, edición 2023, realizado en la ciudad de Buenos Aires, Argentina.

Durante la actividad se trataron temas relevantes como la clasificación de los desechos radiactivos y categorización de las fuentes radiactivas, beneficios de una gestión segura, tipos de transporte y seguridad tanto física como tecnológica.

Santos detalló que para el transporte de fuentes radiactivas se utilizan generalmente Bultos Tipo A y Bultos Tipo B; el primero protege materiales radiactivos sólidos no dispersables o cápsulas selladas; y el segundo contiene fuentes de alta actividad de irradiadores industriales (sistemas que utilizan radiaciones ionizantes para eliminar patógenos de alimentos); equipos de cobaltoterapia (tratamiento médico que utiliza la radiación gamma del cobalto para tratar tumores y enfermedades cancerígenas), entre otros.

Asimismo, mencionó las políticas y estrategias para la gestión segura de las FRSD que establece el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), donde destacó la seguridad tecnológica como la protección de las personas y el medio ambiente contra los riesgos asociados a las radiaciones, así como la seguridad de las instalaciones y actividades que dan lugar a esos riesgos.

Por otra parte, señaló que la seguridad física es la que se encarga de la prevención y detección de actos delictivos, o actos intencionales no autorizados que están relacionados con materiales nucleares, materiales radiactivos, instalaciones conexas o actividades conexas.

El pasado año 2023 el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), asumió las competencias y responsabilidades en lo concerniente a las regulaciones del uso pacifico, aplicación, estudio e investigaciones vinculadas con la energía atómica. En este sentido, la Fundación Cendit se encuentra estrechamente vinculada con la seguridad física de las fuentes radiactivas selladas en desuso desde ese momento, siendo uno de los responsables de movilizar y monitorizar estos elementos de forma segura hasta llegar a su destino.

Trasladar fuentes radiactivas requiere de rigurosas medidas de seguridad, así como un personal especializado y capacitado para dichas labores, debido a los riesgos e importancia que estas requieren, ya que una gestión ineficaz podría generar repercusiones imprevistas en los sistemas de seguridad, vulnerabilidades de seguridad involuntarias, retrasos en la programación e impactos imprevistos en las actividades de respuesta a emergencias.

La seguridad radiológica es un tema sumamente amplio y que se encuentra en constante evolución; por ello los encuentros Cendit se muestran como un espacio fundamental para el intercambio de experiencias, contribuyendo a fortalecer los conocimientos de todo el personal técnico y administrativo en materia de protección radiológica. La formación continua del personal y la actualización constante de los protocolos de seguridad son elementos clave para garantizar que estas fuentes sean manejadas de manera responsable y segura, protegiendo así la salud de las personas y el ambiente.

Prensa Cendit/ Isabel Hernández / Fotos: Geraldine Hernández

Cendit y Fe y Alegría: una alianza por la formación de jóvenes talento

Con una emotiva y conmovedora ceremonia, la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), reconoce el esfuerzo y dedicación de 26 estudiantes de 6to año de electrónica de la Escuela Técnica (E.T) «San José Obrero» de Fe y Alegría, ubicada en la parroquia Antímano; a través de la entrega de certificados aprobatorios por los cursos realizados en la institución durante seis semanas continuas.

Por primera vez, el Cendit abre sus puertas para brindar estas capacitaciones gratuitas a jóvenes de 17 y 18 años, convirtiéndose en un éxito rotundo; en el marco del Programa Nacional Semilleros Científicos y la plataforma digital MujertTI. Esta iniciativa reafirma el compromiso del Gobierno Bolivariano, a través del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), y sus entes adscritos con el desarrollo tecnológico del país, brindándole las herramientas necesarias a la juventud para enfrentar los desafíos del futuro venezolano.

Con la presencia del director ejecutivo del Cendit, Dino Di Rosa, Magister en Investigación de Telecomunicaciones a Alta Frecuencia, acompañado del profesor Rafael Peña, director de la casa de estudios, padres, madres, representantes y demás profesores, las y los futuros técnicos medios fueron homenajeados por la formación obtenida en el área de las telecomunicaciones, fibra óptica y electrónica; donde adquirieron nuevos conocimientos que refuerzan las bases académicas para impulsar el crecimiento de la industria en los próximos años.

En este sentido, Di Rosa agradeció al colegio “San José Obrero”, por confiar la educación de los jóvenes en la fundación y mencionó que realizar esta actividad es un motivo de celebración, ya que es el inicio de una nueva experiencia que demuestra la importancia de la formación teórico-práctica para formar profesionales altamente capacitados en el campo de las telecomunicaciones, abriendo un mundo de abanico en el aprendizaje para la etapa universitaria.

“El recibimiento tan conmovedor que nos brindó este centro educativo nos da pie para pensar en continuar llevando estas formaciones a otras instituciones y convertirnos en multiplicadores de conocimiento, porque la idea no es quedarse con lo aprendido sino ponerlo en práctica con otras comunidades”.

Cendit siembra las semillas del conocimiento en la juventud venezolana

Joshua Blanco, un joven estudiante de 17 años contó su experiencia en la Fundación Cendit, resaltando el aprendizaje obtenido en lo académico y laboral, además de la adquisición de nuevas capacidades como estudiantes de electrónica. “Esta capacitación nos hizo mejorar muchos aspectos de la electrónica como el manejo de componentes, aplicabilidad de la corriente eléctrica y los instrumentos de medición”, acentuó.

Durante las semanas de formación, la primera cohorte de aprendices logró tener un acercamiento bidireccional con profesionales altamente capacitados en el área, mostrándole a los presentes la teoría y práctica. Asimismo, Blanco enfatizó que “las estrategias que usaron los instructores nos hizo entender la teoría y la práctica, puesto que no nos limitaron a un lápiz y un papel, haciéndonos sentir como si estuviéramos haciendo prácticas en el colegio”.

Del mismo modo, Rafael Peña, director de la Escuela Técnica, expresó su agradecimiento con el Cendit por el aporte, apoyo y la posibilidad que le ha dado al poder articular una alianza que trascendió al fortalecimiento de las capacidades y habilidades de los estudiantes del liceo en el campo de la tecnología.

“Con el equipo de la Fundación Cendit hemos creado un potencial tecnológico, ellos nos han permitido que nuestros muchachos puedan mejorar y fortalecer sus habilidades. Nosotros estamos orgullosos de lo que estamos haciendo en conjunto, ya que nos permitirá poder generar una formación en la generación de relevo que este país requiere. Estoy seguro que de la mano con el Cendit vamos a tener muchos éxitos”.

Esta iniciativa se enmarca en el primer vértice de la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación, “Dr. Humberto Fernández-Morán” dedicada a la siembra y preservación del talento científico nacional, ejecutada por las Oficinas de Atención al Ciudadano y direcciones de formación de los entes adscritos del Mincyt a través del Programa Nacional Semilleros Científicos.

Prensa Cendit: Isabel Hernández /Fotos: Candi Moncada

Estudiantes del estado Miranda aprenden sobre telecomunicaciones con el Cendit


Como parte de la masificación del Programa Nacional Semilleros Científicos, la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit) activó dos iniciativas para explicar temas relacionados con el área a estudiantes de instituciones educativas en general, partiendo con las del estado Miranda.

La primera iniciativa es la visita del Cendit en las escuelas, recorriendo todas las secciones de primaria, iniciando con el Complejo Educativo Francisco de Miranda, ubicado en la Base Aérea “Generalísimo Francisco de Miranda” ubicada en La Carlota, parte del punto y círculo del ente público. Allí, los más pequeños hablan a través de un Tuboteléfono para aprender cómo se comporta la comunicación a distancia, conceptos unidireccional y bidireccional. Asimismo, se les pregunta si han visto una central telefónica como la de Cantv, haciéndoles interactuar con medios físicos de transmisión de datos como cables de cobre y fibra óptica, de manera que aprenden a ubicarlos y diferenciarlos en la actualidad del internet.

Al finalizar la actividad, se detalla brevemente qué es el Cendit enfatizando en los prototipos que ha desarrollado, como el Módem ADSL2+ que se distribuye a las instituciones gracias a la industrialización asumida por el Gobierno Bolivariano. De esta manera, se les hace pasar entre ellos una tarjeta electrónica que la mayoría de los estudiantes asocian con las que llevan los controles remotos y las computadoras en su interior.

La segunda acción, es la incorporación a la ruta que entes del Polo Científico Tecnológico implementaron este año escolar con la variante de llevar a los estudiantes a la sede de la Fundación Instituto de Ingeniería para Investigación y el Desarrollo Tecnológico (FIIIDT), el cual ha dispuesto espacios para mostrarles temas de interés como la microscopía, a cargo de especialistas del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) e ingeniería civil con servidores públicos del Centro Nacional de Investigación y Certificación en Vivienda, Hábitat y Desarrollo Urbano (Cenvih).

Investigadores de la Dirección de Fotónica del Cendit destinan parte de su tiempo a a la atención de los más pequeños para abrirles un mundo nuevo: el de la luz como energía. Para ello, les muestran el radiómetro de Crooke, usado para apreciar el movimiento que puede generar diferentes colores de luz láser en las aspas del molinillo; también observan cómo se conducen los haces de electrones en la esfera de Tesla; el movimiento de un motor pequeño a partir del calor del fuego, así como los principios de compresión y descompresión del aire; y finalmente las propiedades de la luz (reflexión, difracción, reflexión) por medio de piezas de diferentes formas y texturas, que se interponen en la dirección de una luz láser.

Así, un total de 60 alumnos de las escuelas técnicas industriales Roque Pinto (municipio Guaicaipuro) y Rubén González (municipio Plaza), ambos del estado Miranda, pudieron recordar cuando estaban en los inicios académicos para hacer una carrera en armar primero una brújula casera, luego de recibida la inducción de qué es el campo magnético natural y artificial, orientados por los profesionales de la Unidad de Propagación y Antenas del Cendit.

De esta manera, la institución, como ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), despliega en el territorio el ideal robinsoniano de aprender haciendo, de forma lúdica y pedagógica, con tópicos relacionados con su norte principal: la construcción de la soberanía en telecomunicaciones desde edades tempranas.

Prensa Cendit / Pierina Quintero

Fotografías/ Pierina Quintero

Cendit se organiza para debatir sobre avances en generación eléctrica y su impacto en Venezuela

Las tecnologías de generación de energía eléctrica son los métodos y sistemas que se utilizan para convertir diferentes tipos de energía, bien sea tradicional o alternativa, en electricidad, ofreciendo una amplia gama de beneficios. Con su evolución ha transformado la sociedad con sus grandes aportes a la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero y contaminantes atmosféricos, mejorando la calidad de vida de todas y todos.

Se puede decir entonces que, el universo en su totalidad es contemplado como un sistema aislado, por lo tanto, su energía permanece constante, teniendo en cuenta que todo parte de las leyes de la termodinámica; son un conjunto de principios fundamentales que describen cómo se comporta la energía en el universo, ya que la energía no se crea ni se destruye, se transforma.

La Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit) ha realizado un encuentro dedicado a sensibilizar y dialogar sobre los últimos avances tanto científicos como tecnológicos en el campo de las telecomunicaciones titulado “Tecnologías de Generación de Energía Eléctrica”, como una lluvia de ideas e intercambio de conocimientos entre el personal técnico y administrativo que labora en la institución.

En esta ocasión, liderada por Héctor Núñez, director ejecutivo encargado del ente adscrito al Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt) y su asistente Vanessa González, quienes resaltaron temas de suma importancia para el país como los principios físicos de la energía eléctrica; además de las fuentes tradicionales como las centrales hidráulicas y nucleares; también mencionó las fuentes alternativas de energías provenientes de la luz del sol, calor, agua , entre otros; generando así las conocidas como fotovoltaica, eólica, geotérmica, maremotriz y undimotriz, las cuales ayudan a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y contribuye a la mitigación del cambio climático.

El momento se hizo propicio para destacar la labor realizada por los profesionales del Cendit en el año 2021 al sincronizar el software de equipos vitales en la unidad 3 del Complejo Hidroeléctrico “Fabricio Ojeda” (La Vueltosa) y así como la recuperación de tarjetas electrónicas de los sistemas de control de la turbina 3 en el mencionado lugar.

Acompañados por un equipo multidisciplinario de científicos y científicas pertenecientes otros entes como la Superintendencia de Servicios de Certificación Electrónica (Suscerte) y la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Tecnologías Libres (Cenditel), engranados con el Ministerio del Poder Popular para Energía Eléctrica, Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec), efectuaron labores en otras plantas termoeléctricas como “Ricardo Zuloaga” (Tacoa, La Guaira), Planta Centro (Carabobo), entre otras.

Este tipo de iniciativas son esenciales para profundizar en los principios básicos de la energía eléctrica y explorar las últimas tendencias en generación y distribución que además ayudan a fortalecer las capacidades nacionales para enfrentar los desafíos actuales y futuros; resaltando la labor realizada por el Cendit convirtiéndose en ejemplo de cómo la investigación y la innovación pueden contribuir a un desarrollo sostenible y soberano.

Prensa Cendit/ Isabel Hernández

Fotografías: Geraldine Hernández

El PNFA en Telecomunicaciones del Cendit y la ESI marca un hito en la historia de la ciencia y tecnología venezolana

La Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit) junto a la Escuela Superior Internacional del Instituto de Estudios Avanzados (IDEA) dieron inicio a la primera cohorte del Programa de Formación Avanzada (PNFA) en Telecomunicaciones, donde 16 profesionales en electrónica, sistemas, programación y desarrollo de software, entre otros, tendrán la oportunidad de reforzar y profundizar sus conocimientos en el campo tecnológico.

Dicho programa ofrece 5 líneas de investigación, destacando: electrónica para las telecomunicaciones, sistemas de transmisión, redes de comunicación, tecnologías de la información y comunicación (TIC) e instrumentación aplicada a las telecomunicaciones; las cuales proporcionan una amplia gama de temas relacionados con las telecomunicaciones y permiten abordar diferentes aspectos del área, con la finalidad de fortalecer la formación académica y el talento venezolano apostando a la construcción del futuro tecnológico de Venezuela.

En este sentido, los participantes tendrán un periodo de formación de dos años para la especialización, tres años para la maestría y cuatro años para el doctorado, con la tarea de desarrollar proyectos innovadores asociados a las líneas de investigación; orientados y acompañados por un personal altamente capacitado en fotónica, electricidad, ciencias, física, robótica, electrónica, entre otros.

Gloria Carvalho, secretaria ejecutiva del Polo Científico Tecnológico Venezolano describió el inicio de este ciclo formativo como “un día de fiesta y un sueño hecho realidad”, el cual inició con el Comandante Supremo de la Revolución Bolivariana Hugo Chávez en el año 2008, al conectar una antena de recepción satelital diseñada y construida por profesionales venezolanos. A partir de ese momento supo que el Cendit tenía no solo las herramientas sino las capacidades de potenciar la tecnología del país.

Dino Di Rosa, presidente del Cendit manifestó que esta oportunidad permite que la institución también se favorezca a través del intercambio de conocimientos con los participantes, formando un diálogo de saberes con múltiples perspectivas y enfoques.

Por otro lado, Rafael Rivero, investigador de la Fundación Cendit, profesor de electrónica en la Universidad Central de Venezuela (UCV) y coordinador del PNFA señaló que la diferencia de esta capacitación es la forma de trabajo, ya que busca formar un equipo que de diversas profesiones “que conecten con el mismo objetivo que es desarrollar el proyecto que contribuya a los beneficios del país”.

Finalmente, el programa se encuentra enmarcado en el cuarto vértice de la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación “Humberto Fernández-Morán” impulsada por el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt), que busca la ampliación del conocimiento para promover resultados de investigación científica y tecnológica que favorezcan el fortalecimiento de los 18 motores de la Agenda Económica Bolivariana.

Prensa Cendit/ Isabel Hernández

Fotografías: Isabel Hernández