(Caracas, 24 de abril de 2025) .- Investigadores venezolanos trabajan en propuestas desde las fortalezas del país para el desarrollo de proyectos espaciales. Rogelio Morales investigador de la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (ABAE) compartió con las trabajadoras y trabajadores de la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit) los avances de los proyectos que lleva Venezuela en materia aeroespacial.
En un esfuerzo continuo por fomentar el debate y la actualización de conocimientos, el Cendit organizó su acostumbrado encuentro semanal con la visita especial de Morales, destacado ingeniero metalúrgico, magíster en Física de los Ensayos No Destructivos y profesor del posgrado de ingeniería de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
Este enriquecedor espacio brindó a los presentes una perspectiva privilegiada sobre los innovadores proyectos que Venezuela está impulsando en el campo aeroespacial, evidenciando las capacidades y el potencial nacional para abrir nuevas fronteras en la investigación científica y tecnológica. “Somos un país con bastante experiencia trabajando en metalurgia, por ende, me desempeño en líneas de investigación que van desde la soldadura, pasando por la construcción en el ambiente lunar hasta la construcción autónoma de agentes artificiales que desarrollen estas tareas”, expresó.
Durante su intervención, el ingeniero Morales profundizó en los significativos avances logrados en diversas líneas de investigación. Un punto central de su presentación fue el primer experimento venezolano sobre el “comportamiento microestructural de la aleación de aluminio aeroespacial durante un procedimiento de soldadura en condiciones de microgravedad”, estudio que se enfoca en analizar el proceso de soldadura TIG (proceso de soldadura por fusión, que emplea un electrodo de tungsteno no consumible y un gas protector) aplicado a una aleación de aluminio en un entorno de microgravedad.
La trascendencia de este proyecto radica en su reciente reconocimiento como ganador del programa Drop Tower Experiment Series (DropTES) 2024. Este logro fue posible gracias al financiamiento otorgado por la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos del Espacio Exterior (UNOOSA), el Centro Aeroespacial Alemán (DLR) y el Fondo Nacional de Ciencia y Tecnología (Fonacit), lo que subraya el potencial y la calidad de la investigación venezolana a nivel internacional.
Asimismo, mencionó otros dos campos de investigación tecnológicas que se llevan a cabo como unión de Venezuela y China en el proyecto de Estación Internacional de Investigación Lunar (ILRS), que se planea construir a principios de la década de 2030, integrado también por Rusia, el cual contempla la construcción de estaciones utilizando vehículos de lanzamientos súper pesados.
Y, finalmente detalló sobre los estudios realizados en el proyecto robótica de enjambre. “Es un campo de investigación en inteligencia artificial que desarrolla mecanismos de organización y coordinación descentralizados y distribuidos entre entidades robóticas. A través de su interacción con otras unidades y con su entorno, estos robots pueden desarrollar un comportamiento colectivo inteligente para resolver tareas complejas”.
Morales señaló que la idea es ingeniar propuestas desde la fortaleza del país ya que todo lo que se hace en el espacio es posible aplicarlas en la Tierra. “Debo resaltar que Venezuela al plantearse propuestas en el espacio, está desarrollando alguna manera de abordar los problemas, el tener la mente para poder abordar la incertidumbre, porque el espacio es incierto, va a permitir desarrollar herramientas que permitan responder a los problemas actuales y futuros del país”.
Este fructífero encuentro entre Cendit y la ABAE no solo permitió a los trabajadores de la fundación conocer de primera mano los prometedores avances en el sector aeroespacial venezolano, sino que también sentó las bases para futuras colaboraciones e intercambio de conocimientos entre ambas instituciones. La presentación de Rogelio Morales despertó un gran interés y entusiasmo, reafirmando la importancia de la inversión en ciencia, tecnología e innovación para el desarrollo estratégico de la nación.
(Caracas, 23 de abril de 2025).- El presidente de la República, Nicolás Maduro, presentó este miércoles avances significativos de la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación Dr. Humberto Fernández-Morán, a propósito de conmemorarse el primer aniversario de su lanzamiento.
En la actividad, realizada en el Parque Científico Tecnológico de Venezuela +Ciencia, participaron también la vicepresidenta Sectorial de Ciencia, Tecnología Ecosocialismo y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez; el ministro para Educación Universitaria, Ricardo Sánchez, el gobernador del estado Miranda, Elio Serrano, y representantes del Ministerio para Ciencia y Tecnología (Mincyt).
“Venimos a celebrar con mucho compromiso el primer año de la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación Dr Humberto Fernández-Morán”, expresó el jefe de Estado venezolano.
Durante la jornada, se presentaron los proyectos de productos probióticos desarrollados por la Fundación Centro de Investigaciones del Estado para la Producción Experimental Agroindustrial (Ciepe).
De igual forma, se encuentran los estuches orientados a la plataforma de la salud como Kit Triple check Elisa para el diagnóstico temprano de VIH, VHC y la enfermedad de Chagas. Además, los kits C Hepatites, desarrollados por investigadores de la Universidad de Los Andes.
“La ciencia va creciendo, la ciencia aplicada para la vida, es lo más importante, la ciencia que encuentra soluciones, que permite un funcionamiento independiente del país”, recalcó el mandatario venezolano al destacar el uso de la ciencia y tecnología al servicio del pueblo.
Recordó que fue gracias a la comunidad científica venezolana que el país logró derrocar el bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos.
En el área de telecomunicaciones, la Fundación Cendit mostró el desarrollo de un electro bisturí, enfocado para el sector veterinario y la plataforma Eduquim, para la enseñanza de la química a niños, niñas y jóvenes.
Entrenamiento de jefes de bancos de sangre
Durante la actividad, la vicepresidenta sectorial de Ciencia, Tecnología Ecosocialismo y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, recalcó que, a partir de este jueves se comenzará un entrenamiento dirigido a jefes de banco de sangre para el uso de los kits de salud.
“Los laboratorios y bancos de sangre del país, las clínicas, requieren sangre segura, cada paciente para donación, para un trabajo de parto, para una cirugía, requiere hacerse el despistaje de enfermedades infecciosas. Esta plataforma es 100% hecha en Venezuela”, recalcó la también ministra para Ciencia y Tecnología.
(Caracas, 24 de abril de 2025).- En el marco del primer aniversario de la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación, Dr. Humberto Fernández-Morán, el presidente de la República Bolivariana de Venezuela Nicolás Maduro Moros pronunció unas palabras que reviven el fervor patrio de nuestros héroes de la independencia, aunque la historia ha sido cercenada intencionadamente, dedicaré las próximas líneas a ofrecer un comparativo histórico de este discurso, desde el Generalísimo Francisco de Miranda hasta nuestros días, demostrando “los genes del éxito” de los que hablaba Humberto Fernández-Morán y que los ideales viven, nacen y renacen a través de los siglos en estas tierras tal y como profesan los masones[1].
“Nunca jamás volveremos a ser esclavos de nada ni de nadie… El siglo 21 se define por el conocimiento, por la ciencia, por la capacidad tecnológica, si alguien tiene duda, que no creo que debe dudar nadie, vea lo que está pasando hoy… Es un año de crear mucha conciencia a todo un país de la importancia de la ciencia soberana, de no depender de nada ni de nadie, ni hoy ni nunca, la independencia del siglo XXI lo he dicho y lo reitero, un millón de veces, es independencia del conocimiento, de la cultura, de la identidad y de la capacidad de los países de tener soluciones propias. ”[2]
El 14 de febrero de 1790, 235 años antes de las palabras del presidente Maduro, tres grandes hombres de ciencia, dos de ellos venezolanos: Francisco de Miranda y José Del Pozo y Sucre, suscribieron en Inglaterra el documento precursor de la independencia, resaltando el veto a la cultura y la ciencia que mantenían los tribunales de la inquisición en las colonias a fin de mantener su dominación:
“La América española desea que la Inglaterra le ayude a sacudir la opresión infame en que la España la tiene constituida; negando a sus naturales de todas las clases el que puedan obtener empleos militares, civiles o eclesiásticos de alguna consideración, y confiriéndoles sólo a españoles europeos de baja esfera por lo general, que vienen allí únicamente para enriquecerse, ultrajar, y oprimir los infelices habitantes, con una rapacidad increíble, prohibiendo aun a la nobleza americana, el que pase a España ni a ningún otro país extranjero, sin licencia particular del Rey, que rarísima vez se concede; verificándose así el tenerlos aprisionados sin causa ni motivo alguno, y lo que es más aún, oprimir también en entendimiento, con el infame tribunal de la Inquisición, que prohíbe cuantos libros o publicación útil parezca, capaz de ilustrar el entendimiento humano, que así procuran degradar, haciéndole supersticioso, humilde y despreciable, por crasa ignorancia”.[3]
Alejar a las colonias del entendimiento, de la cultura y sobre todo de la industrialización era vital para España con el fin de mantener su hegemonía y sobre todo el vil comercio de esclavos, así lo haría notar Alejandro Humboldt, destacado científico prusiano que llegó a Cumaná en 1799 en compañía de Amado Bonpland científico francés, hicieron un recorrido de cuatro años por el continente que dejarían reseñado en una obra de miles de páginas publicada por tomos con el nombre de “Viaje a las regiones equinocciales”.
“… la idea de la colonia es en sí una idea inmoral, es la idea de un país obligado a tributar a otro, de un país en el que no se debe alcanzar sino un determinado grado de prosperidad, en el que la industria y la ilustración no se deben difundir sino hasta un cierto punto. Pues más allá de estos límites … la madre patria ganaría menos, más allá de esta mediocridad la colonia demasiado fuerte, demasiado en condición de sostenerse a sí misma se independizaría. Todo gobierno colonial es un gobierno de desconfianza.” [4]
Aunque parezca inverosímil el uso del término “industrialización”, Humboldt en sendos documentos estadísticos denominados “Análisis Político de la Nueva España” y “Análisis Político de Cuba”, había demostrado como vetar la industrialización de la época como: calderas eficientes, moliendas, análisis químicos y tecnificación de procesos entre otros era indispensable para justificar el salvaje e inhumano tráfico de personas, de ese modo se creaba la necesidad de importar más y más esclavos aumentando las ganancias de venta humana. Humboldt no solo cuantifica en dinero las ganancias producto de ese negocio inmoral, sino también describe abiertamente los tratos salvajes a los que eran sometidos.
“En ninguna parte debe un europeo tener más vergüenza de serlo que en las islas, ya sean las francesas, las inglesas, las danesas o las españolas. Discutir sobre qué nación trata a los negros con más humanidad es burlarse de la palabra humanidad y preguntarse si es más agradable ser destripado o despellejado.”[5]
“Algún día no se querrá creer que antes de 1826 no había en ninguna de las Antillas mayores una ley que impidiese el vender los niños de corta edad y separarlos de sus padres, ni que prohibiese el método degradante de marcar los negros con un hierro caliente para reconocer más fácilmente el ganado humano”[6]
Después de tan solo tres párrafos de Humboldt es sencillo comprender la admiración mutua con el Libertador Simón Bolívar, ambos hombres no escatimarían en dejar memoria escrita de dicho afecto, Humboldt advertía al mundo:
“Cambios saludables se alistan en la situación de los esclavos. Según las leyes que gobiernan los nuevos Estados independientes, la esclavitud se extinguirá poco a poco: es la república de Colombia la que ha dado un ejemplo de manumisión progresiva. Esta medida a la vez humana y prudente se debe al altruismo del General Bolívar cuyo nombre resplandece no menos por sus virtudes ciudadanas y su moderación en el éxito que por el brillo de su gloria militar.”[7]
Es que el segundo viaje de Humboldt y Bonpland a América pasadas dos décadas de la primera expedición no era casual, el Libertador buscaba ilustrar su patria con las luces, cuya escasez había facilitado nuestra dominación: “nos han dominado más por la ignorancia que por la fuerza”, “moral y luces son nuestras primeras necesidades” son quizás los recuerdos mas universalizados que tenemos del pensamiento del libertador sin ahondar en qué significaban. Bolívar quería el mismo progreso científico para la Gran Colombia, que Nicolás Maduro impulsa para la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, CELAC. Un desafortunado incidente con Amado Bonpland haría que el Libertador redactara una carta al gobernante de Paraguay que no deja duda de este hilo conductor: Ciencia e Independencia son un solo concepto.
“Al Excmo. Señor Gaspar Rodríguez de Francia,
Excmo. señor:
Desde los primeros años de mi juventud tuve la honra de cultivar la amistad del señor Bonpland y del barón de Humboldt, cuyo saber ha hecho más bien a la América que todos los conquistadores.
Yo me encuentro ahora con el sentimiento de saber que mi adorado amigo, el señor Bonpland, está retenido en Paraguay por causas que ignoro. Sospecho que algunos falsos informes hayan podido calumniar a este virtuoso sabio y que el gobierno que V.E. preside se haya dejado sorprender con respecto a este caballero. Dos circunstancias me impelen a rogar a V.E. encarecidamente la libertad del señor Bonpland. La primera es que yo soy la causa de su venida a América, porque yo fui quien le invité a que se trasladase a Colombia, y ya decidido a ejecutar su viaje, las circunstancias de la guerra lo dirigieron imperiosamente hacia Buenos Aires; la segunda es que este sabio puede ilustrar mi patria con sus luces, luego que Vd. tenga la bondad de dejarle venir a Colombia, cuyo gobierno presido por la voluntad del pueblo.
Sin duda V.E. no conocerá mi nombre ni mis servicios a la causa americana, pero si me fuese permitido interponer todo lo que valgo por la libertad del señor Bonpland, me atrevería a dirigir a V.E. este ruego. ¡Dígnese V.E. oír el clamor de cuatro millones de americanos libertados por el ejército de mi mando, que todos conmigo imploran la clemencia de V.E. en obsequio de la humanidad, de la sabiduría y la justicia, en obsequio del señor Bonpland.
El señor Bonpland puede jurar a V.E. antes de salir del territorio de su mando que abandonará las provincias del Río de la Plata, para que de ningún modo le sea posible causar perjuicio a la provincia del Paraguay, que yo, mientras tanto, le espero con el ansia de un amigo y con el respeto de un discípulo, pues sería capaz de marchar hasta el Paraguay sólo para libertar al mejor de los hombres y al más célebre de los viajeros.
Excmo. señor: yo espero que V.E. no dejará sin efecto mi ardiente ruego, y también espero que V.E. me cuente en el número de sus más fieles y agradecidos amigos siempre que el inocente que amo no sea víctima de la injusticia.
Tengo el honor de ser de V.E. atento obediente servidor.
Esta llama se aviva con Juan Manuel Cagigal destacado matemático venezolano, nacido en 1803, nieto del protector de Francisco de Miranda, brillaba para aquella época como científico prominente, en 1828 le ofrecen ser director de la Universidad de Alcalá de Hernáes, a lo cual respondió «No puedo, señores, abandonar a mi patria donde me necesitan más que en otra parte … El prefería ante todo suministrar sus conocimientos a la juventud estudiosa de su patria que a las prebendas o sinecuras que le ofrecían los rectores de las universidades de Francia y España«.[9]Ya en Venezuela, Juan Manuel Cagigal le escribe una carta al libertador poniéndose a la orden para crear la escuela de ingeniería militar en el país, su propuesta se materializaría más adelante con la fundación de la Academia de Matemáticas de Venezuela en 1831, durante su discurso inaugural Cagigal deja clara la importancia de la industrialización y las matemáticas:
“… cuando la industria de un país está en la infancia, mayores son los auxilios que puede recibir de la geometría y mecánica, para acelerar sus progresos, y entrar en la lid y marchar a la par de los países más industriosos”[10]
Son muchos más los hombres y mujeres de ciencia e independencia que mantendrían este fervor patrio, es ahora más sencillo comprender por qué el Dr. Humberto Fernández-Morán diría en 1959 ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO “El acceso libre al conocimiento es la máxima expresión de libertad”, conocía bien la historia y sabía cómo todos sus ancestros defendieron con la vida el acceso a las luces sin discriminación alguna. La República Bolivariana de Venezuela se honra hoy del ejército libertario de más de 60.000 hombres y mujeres de ciencia y los más de 400.000 niños y niñas que crecen con la llama de ciencia e independencia que nos heredaron los libertadores.
[1] C.W. Leadbeater, La Masonería, la vida oculta 1985.
[2] Discurso del presidente Nicolás Maduro el 23 de abril de 2025 a las 6:46pm en el marco del aniversario 1 de la gran Misión Ciencia Tecnología e Innovación Doctor Humberto Fernández-Morán.
[3]Propuesta fundamental a William Pitt, en consecuencia, de la conferencia tenida en Hollwood, libro Documentos Fundamentales de Miranda, editorial el perro y la rana página 99.
[4] Diarios de viaje de Alejandro Humboldt, 1803, Guayaquil, apartado “Colonias”
[5] Diarios de viaje de Alejandro Humboldt, 1803, Guayaquil, apartado “Colonias”
(Caracas, 31 de marzo de 2025).- «La justicia está presente cuando hace honor a la verdad, en esta película se muestra solo una pequeña parte de los aportes de este insigne venezolano. Tenemos la tarea de recuperar la obra que Humberto Fernández-Morán dejó para Venezuela». Fueron las palabras de Orlando Pérez, investigador del Instituto Zuliano de Investigaciones Tecnológicas (Inzit) y parte de los colaboradores fundamentales en la construcción del audiovisual, que ya se encuentra disponible con libre acceso en internet.
Durante la proyección de la película realizada en el Auditorio «Rafael Urdaneta», de la sede judicial del Tribunal Supremo de Justicia en Maracaibo, estado Zulia, estudiantes de la Universidad de las Ciencias de las Salud «Hugo Chávez Frías», así como jóvenes de la Universidad Nacional Experimental Politécnica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, Unefa, presenciaron el recuento histórico que rinde honor al padre de la miniaturización de la información.
Gloria Carvalho, escritora del libro «Descubrir lo invisible» compartió con los presentes los numerosos reconocimientos recibidos por Fernández- Morán, en los cuales resalta el entregado por el centro documental de Cambridge en Inglaterra, quien lo declara como el hombre más importante del mundo en el año 1993. «Estudiando a este venezolano nos damos cuenta que nacen y renacen grandes hombres y mujeres que solo piensan en su patria», expresó.
Jueces de paz, movimiento futuro y estudiantes unidos por la ciencia
Jueces y juezas de Paz de la ciudad de Maracaibo se amalgamaron en aplausos y ovaciones alrededor del documental, junto a estudiantes y representantes del Movimiento de Científicos e Innovadores por el Futuro.
Lenin Valera, coordinador regional del Movimiento Futuro Zulia expresó que la actividad en la que se contabilizó la presencia de más de 350 personas entre jóvenes estudiantes, jueces de paz y comunidad, invita a las y los venezolanos a enorgullecerse de nacer en esta patria. «El legado de Humberto Fernández-Morán, es por encima de todo, el orgullo de ser patriota y bolivariano. Seguiremos levantando sus banderas en todos los lugares», puntualizó.
La actividad forma parte de los esfuerzos del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología para la promoción del conocimiento científico y el rescate de la memoria histórica de Venezuela, ordenado por el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros.
En el marco de la promoción del conocimiento científico y el rescate de la memoria histórica de Venezuela, el Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología (Mincyt) desarrolló dos foros este 27 de marzo en la ciudad de Maracaibo, para revivir el magnífico trabajo ejecutado por uno de los más grandes científicos venezolanos, Dr. Humberto Fernández Morán. Los encuentros contaron con la masiva participación de las y los jóvenes estudiantes de la Universidad Privada “Dr. Rafael Belloso Chacín” (URBE) y la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV) sede Eje Cacique Mara.
A través del Foro: Vida y obra de Humberto Fernández-Morán, Gloria Carvalho investigadora y autora del libro biográfico, compartió con la audiencia el impacto de las investigaciones que este venezolano, oriundo de La Cañada, estado Zulia, realizó en la ciencia mundial, desde el ya conocido bisturí de diamante hasta el estudio del funcionamiento del cerebro humano para emular sus capacidades de almacenamiento de información y así desarrollar tecnologías de miniaturización de dispositivos electrónicos usando la cuchilla de diamante y el ultramicrotomo para 1954.
Una cátedra libre para honrar a un gigante
Plácido Martínez, vicerrector académico de la Urbe manifestó la trascendencia de la actividad dada la importancia de visibilizar el trabajo del «cañadero», padre de la ciencia moderna de Venezuela. «Por iniciativa de la Alcaldía de la Cañada de Urdaneta y en alianza con la Urbe, estamos creando en este momento la Cátedra Libre Ciencia y Tecnología Humberto Fernández-Morán». «Los jóvenes deben seguir estos ejemplos de creación e innovación y mantenerse con la convicción de que hay que luchar por los sueños y prepararse para salir adelante», enfatizó.
Ubevistas maracaiberos honraron a su paisano
Estudiantes de las carreras psicología y comunicación social así como docentes y personal administrativo de la UBV Maracaibo participaron activamente en el foro-conversatorio sobre el libro, que se enfocó en revelar la historia de héroes de la ciencia como punto de partida que fomenta las vocaciones de futuros innovadores.
Eyvis Delgado, estudiante del primer semestre de comunicación social de la UBV expresó que la actividad le abrió un mundo de conocimiento que desconocía, incluso a pesar de haber investigado a través de internet sobre la vida de HFM. «Estos encuentros demuestran el sesgo que existe en los buscadores de internet donde te muestran información parcializada que no nos permite conocer realmente nuestra historia, debemos escribir y comunicar la verdad, la historia que a muchos no les conviene que sepamos».
En un mundo dominado por la tecnología, Venezuela reafirma la necesidad de formar ciudadanos críticos y creativos. La historia de Fernández-Morán enseña que, pese a las adversidades, la perseverancia y el acceso al conocimiento pueden cambiar el curso de la historia y aportar soluciones que promuevan el bienestar de los pueblos haciendo ciencia para la vida.
Fotosgrafías y texto/Prensa Polo CyT/Candi Moncada
El sector científico y tecnológico, junto al pueblo venezolano, se congrega en la Plaza Bolívar, en Caracas, para acompañar los restos mortales del doctor Humberto Fernández-Morán que ingresan este lunes al Panteón Nacional.
Desde muy temprano, integrantes del Sistema de Ciencia y Tecnología se concentraron en los alrededores de la Asamblea Nacional, donde se realizó una sesión especial para conceder los honores al científico venezolano, que fue referente para diferentes áreas científicas durante el siglo XX.
La vicepresidenta del Centro de Investigaciones Científicas para la Medicina Ancestral (Cicmeta), Dra. Lesbia Muro manifestó que como “mujer venezolana, uno se siente realmente orgullo del reconocimiento que hace la Patria a una persona tan destacada en la ciencia como es el doctor Humberto Fernández-Morán. Era justo y necesario ese reconocimiento”.
Manifestó que, como científica, se celebra su legado, que forma parte de nuestra historia y cultura, y que sigue creciendo y fortaleciéndose con el tiempo.
“Estamos todos muy orgullosos aquí recibiendo los restos inmortales de Humberto Fernández-Morán, porque él junto con nuestros grandes hombres y mujeres de la historia conforman la raíz poderosa que cada día crece más y se evidencia porque cada vez más los árboles y las hojas y las frutas son más frondosas y victoriosas”, puntualizó.
Por su parte, Geraldine Jiménez Roa, gerente de Formación del Observatorio Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, destaca la importancia del día al rendir homenaje al doctor Humberto-Fernández Morán, quien es reconocido por su contribución a la ciencia y tecnología en el país, al llegar al Panteón Nacional para honrar su legado.
“Hoy es un día emblemático y maravilloso para todo el Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación debido a que una figura insignia, una reivindicación histórica. El doctor Humberto-Fernández Morán llega al Panteón Nacional a acompañar a nuestro libertador desde lo que es la ciencia y la tecnología, alguien que siempre dio la cara por su país, que siempre visionó grandes cosas para su patria desde lo que es el avance y la revolución tecnológica”, manifestó.
Rosa Belén Pérez, en representación de Mujeres de las Ciencias, expresa su orgullo al participar en el homenaje al Dr. Humberto Fernández-Morán, un destacado científico venezolano del siglo XX, cuyo legado ha sido fundamental para el desarrollo tecnológico y científico de Venezuela.
“Estoy muy orgullosa porque es uno de los científicos más importantes del siglo XX y que nos llena de orgullo el camino que abrió para el desarrollo tecnocientífico de Venezuela. Y como venezolana me siento orgullosa porque si hay algo que él siempre cuidó fue su gentilicio y su ejemplo nos llena de orgullo”, concluyó.
(Caracas, 17 de marzo de 2025).- A la edad de 75 años, falleció el 17 de marzo de 1999 el Dr. Humberto Fernández-Morán como consecuencia de una aneurisma cerebral.
Uno de los más importantes hombres de ciencia que ha dado Venezuela murió en Estocolmo, Suecia, donde conoció a su esposa y tuvo sus hijos.
Fue allí donde incineraron sus restos y sepultados provisionalmente, pues en cumplimiento con sus deseos sus exequias fueron repatriadas en 2005 a su ciudad natal, Maracaibo, donde reposaban en el Cementerio El Cuadrado.
Después de casi 26 años, los restos fueron exhumados para ser llevados al Panteón Nacional. Este evento fue acompañado de actividades religiosas y culturales, una de ellas, lo llevó por 48 horas a una capilla ardiente en el Instituto Venezolano de Investigaciones (IVIC), sucesor del IVNIC, creado por Fernández Morán.
«Soy un misionero y un solitario en mi propia tierra, como lo fue Miranda y como lo fue Bolívar. Persistiré en mi firme empeño de cumplir callado mi misión como investigador, como científico y educador, ocultando con jovialidad de Sancho Panza mi tristeza de Don Quijote», dijo en una ocasión a la prensa en Caracas.
El estado Zulia parió a uno de los más grandes científicos venezolanos, que resaltó por las adelantadas investigaciones con respecto a la época, debido a que sentó las bases para la construcción de un reactor nuclear con fines pacíficos e investigativos, fundó el Instituto Venezolano de Investigaciones Neurológicas y Cerebrales (IVNIC), ahora IVIC.
Contribuyó de manera fundamental al desarrollo de la técnica de la microscopía electrónica, así como de sus aplicaciones en biología y la medicina.
También introdujo por primera vez el concepto de crioultramicrotomía, la cuchilla de diamante y sus aplicaciones para el seccionado ultrafino y ayudó en la mejora de los ultramicrotomos.
Además, estudió la estructura de las rocas lunares traídas por la misión Apolo.
El Dr. Humberto Fernández-Morán no vaciló en mostrar su amor a Venezuela, pese a estar exiliado, su lealtad a la independencia y al Libertador Simón Bolívar. Destacó siempre por su personalidad y una inteligencia privilegiada con grandes iniciativas para el impulso de la ciencia venezolana.
El Gobierno de Venezuela, que lidera el presidente Nicolás Maduro, rinde homenaje a este reconocido científico con la Gran Misión Ciencia, Tecnología e Innovación y la Universidad Nacional de las Ciencias que llevan su nombre.
Además, en Caracas se creó el Premio Municipal de Ciencia y Tecnología Dr. Humberto Fernández-Morán, para fortalecer la ciencia en el país y reconocer los trabajos de los estudiantes del municipio Libertador.